El proyecto de reforma laboral sometido al Congreso por el Poder Ejecutivo plantea cambios significativos, entre ellos la modificación del pago de los domingos. Según la propuesta, si el trabajador toma su descanso de 36 horas en otro día de la semana, el domingo se pagará como un día ordinario, sin el recargo del 100%. Esta medida modifica el artículo 163 del Código de Trabajo y deroga parcialmente la Ley 108 del 21 de marzo de 1967, que establecía los domingos como días no laborables.
El proyecto también introduce cambios en la jornada laboral extendida, permitiendo un máximo de 12 horas diarias bajo acuerdo entre empleadores y trabajadores, con la condición de que el promedio semanal no supere las 44 horas. Bajo esta modalidad, se prohíben las horas extras y el horario debe ser comunicado con antelación.