El plan de repatriación de ilegales es apoyada por el Ejército, Fuerza Aérea, Fuerza de Tarea Conjunta Ciudad Tranquila, la Policía, el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas y la Procuraduría.Para este plan, se cuenta con la asistencia del Ejército, la Fuerza Aérea, la Fuerza de Tarea Conjunta Ciudad Tranquila (Ciutran), la Policía Nacional, el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas y la Procuraduría General de la República. Según el Vicealmirante Lee Ballester, el operativo es "a gran escala" y se están verificando las capacidades que habilita la Fuerza Aérea para garantizar el cumplimiento de la meta establecida.
El ministro de Defensa, Carlos Antonio Fernández Onofre, destacó la importancia de las estrategias de inteligencia para estas operaciones, afirmando que "el motor de las operaciones militares es la inteligencia", y que se están afinando las estrategias y actualizando las apreciaciones correspondientes para desplegar el operativo en gran escala.
El operativo ya ha comenzado en diversas zonas del Gran Santo Domingo, incluyendo Villa Duarte, Villas Agrícolas, Villa Consuelo, San Carlos, Puente Juan Carlos, Los Frailes, y otras áreas urbanas. Los haitianos detenidos serán llevados a centros de acogida en Benedicto, Haina, Dajabón, y en los cruces fronterizos, donde se realizará el proceso de registro antes de proceder con la deportación.
El ministro de Relaciones Exteriores, Roberto Álvarez, enfatizó que la cifra de 10,000 repatriaciones por semana "no se tomó a la ligera", sino que se basa en la experiencia y las capacidades disponibles. Además, subrayó que la medida se llevará a cabo "cumpliendo las normas internacionales" y respetando la dignidad de las personas involucradas.
Por su parte, el gobierno haitiano, a través de la ministra de Exteriores Dominique Dupuy, calificó la decisión de "lamentable" y pidió a República Dominicana respetar los derechos de los inmigrantes haitianos. En respuesta, Álvarez aseguró que se respetarán los derechos humanos de los deportados, tal como lo establece la legislación internacional.
Como resultado del anuncio del operativo, se observó ayer una disminución significativa de la presencia de trabajadores haitianos en lugares donde se desarrollan proyectos de construcción en el Gran Santo Domingo, debido al temor de ser detenidos y repatriados.
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