Santo Domingo, RD – 23 de julio de 2024 – La recomendación de mantenerse hidratado para enfrentar las altas temperaturas se ve comprometida en República Dominicana debido a la contaminación y la presencia de microplásticos en el agua embotellada. Esther Tavarez, sommelier de agua graduada en Doemens, Alemania, ha expresado su preocupación por las prácticas de almacenamiento y la calidad del agua embotellada en el país.
Tavarez señala que el problema de la exposición al sol de los botellones no se limita a su exhibición en colmados, sino que también comienza en las fábricas y durante el transporte. “La exposición a la luz solar no es solo un problema que ocurre en los anaqueles de los colmados. El problema comienza en la fábrica, donde los botellones se transportan en camiones abiertos, lo que permite que el agua esté expuesta al sol desde el inicio,” explicó Tavarez en una entrevista con Listín Diario. La exposición prolongada al sol puede llevar a la liberación de microplásticos que afectan la salud.
En República Dominicana, se comercializan más de 200 marcas de agua local, pero la mayoría del agua mineral es importada. Tavarez subraya que el acceso a agua mineral de calidad es limitado para gran parte de la población, ya que las opciones más económicas cuestan entre 60 y 70 pesos por botellas de uno y 1.5 litros, y se encuentran en envases plásticos o de cristal, pero no siempre bajo condiciones óptimas.
“Hay un gran problema con la calidad del agua local. Aunque el agua embotellada puede ser una opción conveniente, a menudo carece de minerales esenciales debido al proceso de osmosis inversa al que se somete,” comentó Tavarez. Este proceso elimina minerales beneficiosos, resultando en agua que no proporciona una hidratación adecuada.
La experta también destacó la importancia de la vida útil de los botellones, sugiriendo que estos deben ser reemplazados regularmente en lugar de utilizarse hasta que el envase se desgaste.
Tavarez, abogada y sommelier de agua, aboga por la mejora en la calidad del agua local y la implementación de mejores prácticas de almacenamiento para asegurar que el agua embotellada no solo sea segura sino también beneficiosa para la salud.