Ana Karina Ramos, la joven agredida por un guardia de seguridad y encontrada al borde de la muerte en Pedro Brand, sigue bajo cuidados médicos intensivos en el Hospital Doctor Vinicio Calventi. Ramos, que fue hallada con heridas graves e infectadas por miasis (infestación de gusanos), permanece en aislamiento para evitar más contaminaciones.
Estado Médico y Cuidados
El director del hospital, José Alfaro, informó que las lesiones de Ramos son tratadas dos veces al día, cada 12 horas. Ayer, mientras los reporteros de LISTÍN DIARIO visitaban las instalaciones, se le realizaban imágenes médicas para vigilar la infección en su cuerpo. Alfaro destacó que la principal preocupación es la presencia de gusanos, debido a que se encontraban en todo su cuerpo cuando llegó al hospital, y todavía podrían esconderse algunos.
El pasado jueves, Ramos tuvo que recibir una transfusión de dos pintas de sangre debido a una pérdida significativa del líquido vital. Según su tía, Isabel de Jesús, "le salió un pajarito de esos por la boca y los oídos", lo que refleja la gravedad de su estado.
Estado Emocional
Ramos, consciente y capaz de hablar, enfrenta un intenso miedo y nerviosismo. Su hermana, María Delfina Paulino, y su tía Isabel de Jesús, comentaron que la joven está extremadamente asustada, reaccionando con pánico cuando alguien entra a la habitación. "Está tan asustada que no puede ver que abran la puerta, porque dice: ‘¡Ay, ¿quién es?’", explicó Paulino.
La familia intenta protegerla de hablar sobre el ataque, entendiendo que su salud es la prioridad en este momento. "No queremos preguntarle nada sobre lo que pasó todavía, porque es algo demasiado fuerte", dijo su hermana.
Clamor por Justicia
La tía de Ramos expresó una profunda preocupación y un llamado a la justicia. "Qué hubiese sido de esas dos niñas pequeñas de cuatro y dos años y todo por mejorar y ganarse dos pesos trabajando", se preguntó, exigiendo que la justicia haga su trabajo para que su sobrina no tenga que sufrir más.
Ramos ha demostrado una fortaleza notable, diciéndole a su familia que es "fuerte y una guerrera de Dios". La familia y el equipo médico continúan enfocándose en su recuperación, esperando que las autoridades tomen las acciones necesarias contra los responsables del ataque.