La gente se reúne en el Zócalo para celebrar al recién juramentado presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, en la Ciudad de México, el 1 de diciembre de 2018
Rodríguez detalló que los 22 homicidios corresponden a candidatos oficialmente registrados ante el Instituto Nacional Electoral (INE) o los institutos electorales locales. Además, hubo cuatro homicidios de precandidatos, es decir, personas registradas oficialmente ante sus partidos pero que no llegaron a tener una inscripción oficial en los organismos electorales. También se contabilizan 10 homicidios de personas aspirantes no oficialmente registradas, pero que habían manifestado sus intenciones de contender.
Estas cifras oficiales contrastan con los reportes de organizaciones independientes, como Data Cívica, que registra 30 homicidios de candidatos, y otras consultoras que incluso llegan a cifras mayores. El presidente Andrés Manuel López Obrador defendió los datos oficiales, destacando que cualquier asesinato, aunque sea uno solo, es una tragedia humana.
López Obrador negó la existencia de homicidios no contabilizados, argumentando que todos los homicidios deben registrarse y que no hay una cifra oculta. Además, criticó a la oposición por politizar el tema de la violencia y sugirió que intentan explotar el dolor humano por motivos políticos.
Ante la preocupación por la seguridad durante las elecciones, se ha anunciado un despliegue importante de fuerzas militares y de seguridad pública. Más de 27,000 miembros de las Fuerzas Armadas se sumarán a los 233,543 agentes que ya están trabajando en labores de seguridad pública para garantizar un ambiente seguro durante los comicios.