Imagen ilustrativa.
El trabajo, que involucró a más de 1,500 niños chinos con parálisis cerebral, utilizó secuenciación genómica y encontró que las mutaciones genéticas eran más frecuentes en los casos de PC con asfixia al nacer. Esto sugiere que la falta de oxígeno podría ser secundaria al defecto genético subyacente, desafiando así la concepción anterior.
El profesor Jozef Gecz, uno de los líderes del estudio, enfatizó que aproximadamente el 24,5% de los niños chinos estudiados tenían variaciones genéticas relacionadas con la parálisis cerebral. Además, destacó que en el 8,5% de los casos con una causa genética identificada, se encontraron tratamientos clínicamente viables, lo que subraya la importancia de entender las vías genéticas en el desarrollo de la enfermedad.
El profesor Alastair MacLennan, quien ha estado investigando sobre la parálisis cerebral durante varias décadas, señaló que estos hallazgos tienen implicaciones significativas para la atención médica y el tratamiento. Destacó la importancia de realizar pruebas genéticas tempranas en niños con parálisis cerebral, especialmente en aquellos con factores de riesgo como la asfixia al nacer, para garantizar que reciban la atención adecuada.
Los resultados de este estudio refuerzan la necesidad de un enfoque más personalizado y temprano en el diagnóstico y tratamiento de la parálisis cerebral, lo que podría mejorar significativamente los resultados a largo plazo para los niños afectados.