Aunque sus rivales no se presentaron a la competencia, Eliana no dudó en enfrentarse a sí misma, desafiando récords y demostrando su indomable espíritu competitivo. Con cuatro medallas de oro en su haber, incluyendo una en la prueba de 50 metros espalda, donde rompió el récord mundial en su categoría, esta nadadora sigue demostrando que la edad no es un obstáculo para alcanzar la gloria.
Con una larga trayectoria en el mundo de la natación, Eliana comenzó a destacarse desde temprana edad, convirtiéndose en campeona nacional a los 13 años. A lo largo de su vida, ha alternado su pasión por la natación con otras disciplinas deportivas, como la equitación, donde también alcanzó el éxito a nivel nacional.
A pesar de enfrentar diversos desafíos a lo largo de su vida, como un accidente que la llevó de regreso a las piscinas a los 78 años y un ataque al corazón, Eliana nunca se rindió. Hoy, a sus 89 años y con un marcapasos, sigue entrenando regularmente y transmitiendo su pasión por el deporte a través de clases de natación para adultos mayores en Viña del Mar.
Su mensaje es claro: la vida se vive hasta el último minuto, y la mente tiene un poder extraordinario para superar cualquier obstáculo. Con su ejemplo de determinación y perseverancia, Eliana inspira a todos aquellos que tienen el deseo de seguir adelante y nunca rendirse, sin importar la edad.