Un bombero trabaja en el Jardín Botánico después de un incendio forestal en Viña del Mar, Chile, el 4 de febrero de 2024.
Autor: Alfonso Alvarez, www.laaspalomastv.com
En Villa Independencia, epicentro de los incendios forestales mortíferos en Chile, los residentes describen el horror de escapar de las llamas y presenciar la destrucción de sus hogares. Abraham Mardones, un sobreviviente, relata cómo el fuego consumió todo, dejándolo solo con la ropa que llevaba puesta y sus zapatillas. A pesar de haber perdido todos sus bienes materiales, tuvo el coraje de tapar el cuerpo calcinado de una de sus vecinas.
Las llamas, propagadas por el viento, devastaron la región de Valparaíso, cobrando la vida de al menos 99 personas hasta el momento, en lo que se considera la peor tragedia en Chile desde el terremoto de 2010. En Villa Independencia, un sector densamente poblado, se contabilizaron al menos 19 muertos.
Los sobrevivientes enfrentan la devastación de sus hogares y la pérdida de sus pertenencias, pero algunos, como Mardones, encuentran consuelo en la preservación de la vida a pesar de las difíciles circunstancias. La tragedia continúa afectando a miles de personas, con un número estimado de 3,000 a 6,000 viviendas afectadas.
En las calles, los residentes recuerdan momentos de desesperación, con cuerpos quemados abandonados en el cerro, mientras enfrentan la difícil tarea de reconstruir sus vidas en medio de los escombros y las cenizas que dejaron los incendios forestales.