Por Alfonso Alvarez, www.laspalomastv.com
Fecha: 01 de enero de 2024
Una serie de sismos de gran magnitud, alcanzando hasta 7.6 en la escala Richter, sacudieron el centro de Japón el lunes, desencadenando alertas de tsunami con olas potenciales de hasta cinco metros, según informaron las autoridades japonesas. A pesar de la magnitud de los temblores, no se reportaron anomalías en las centrales nucleares del país.
Los sismos se produjeron en la península de Noto, en la prefectura de Ishikawa, alrededor de las 16:10 horas locales, según el Instituto de Estudios Geológicos de Estados Unidos (USGS). Las autoridades japonesas emitieron una advertencia urgente, instando a los residentes a buscar refugio en zonas elevadas debido al riesgo de tsunamis.
Edificios dañados a lo largo de una calle de la ciudad de Wajima, en la prefectura de Ishikawa, el 1 de enero de 2024, después de que un terremoto de 7.5El canal de televisión nacional NHK emitió un llamado a la población: "Todos los residentes deben ir inmediatamente a terrenos más elevados". A pesar de la urgencia, instaron a priorizar la vida sobre las posesiones. Olas de tsunami de hasta 1.2 metros golpearon el puerto de Wajima en la península de Noto.
Las autopistas cercanas al epicentro fueron cerradas, y los trenes de alta velocidad entre Tokio y la prefectura de Ishikawa quedaron interrumpidos. Aunque unos 33,500 hogares quedaron sin electricidad en las prefecturas de Ishikawa, Toyama y Niigata, no se registraron irregularidades en las centrales nucleares, según el portavoz gubernamental Yoshimasa Hayashi.
El centro de alerta de tsunamis del Pacífico advirtió sobre posibles olas peligrosas en un radio de 300 km alrededor del epicentro a lo largo de las costas de Japón, con alturas de hasta cinco metros. Esta advertencia también afectó a ciudades del extremo oriente ruso, incluyendo Vladivostok, que emitieron alertas de tsunami.
Japón, ubicado en el "cinturón de fuego" del Pacífico, es propenso a los terremotos, y aunque las construcciones están diseñadas para resistir estos eventos, la población sigue preparándose para situaciones de emergencia. El país aún recuerda el devastador terremoto y tsunami de 2011, que resultó en la catástrofe nuclear de Fukushima.