17 de enero del 2024.
Santo Domingo, RD - La fama y la fortuna pueden tener su precio, y para muchas celebridades, la línea entre la admiración y la obsesión de sus fanáticos puede volverse peligrosamente delgada. Celebridades como Shakira, Miley Cyrus, Ariana Grande, Billie Eilish y Selena Gómez han tenido que enfrentar situaciones de acoso por parte de seguidores que cruzan límites inaceptables.
Recientemente, la casa de Miley Cyrus en Los Ángeles fue escenario de un incidente alarmante. La policía arrestó a Lexander Karddalian, un hombre de 52 años que perseguía a la exestrella de Disney desde 2018. A pesar de una orden de restricción previa, Karddalian se presentó en la puerta principal con un animal de peluche. Este incidente resalta la realidad perturbadora que enfrentan algunas celebridades en manos de sus admiradores.
Otro caso inquietante involucra a Daniel John Valtier, un hombre de 56 años que acosaba a la superestrella Shakira, llegando al extremo de afirmar que la cantante barranquillera era su esposa. Valtier publicaba constantemente en redes sociales sobre Shakira, entregaba chocolates y botellas de vino en su casa, y afirmaba tener una familia con ella. Las autoridades intervinieron para poner fin a este comportamiento obsesivo.
Ariana Grande también experimentó el lado oscuro de la admiración cuando Aharon Zebulun Israel Brown, un acosador, la visitó en su casa portando un cuchillo. Brown fue declarado culpable de acecho, robo residencial y amenazas criminales, enfrentando una sentencia de tres años y ocho meses de prisión, con una orden de mantenerse alejado de la estrella durante los próximos diez años.
La ganadora del Grammy, Billie Eilish, tuvo que lidiar con la presencia intrusiva de Prenell Rousseau, un joven que se presentó siete veces en su casa. Ante esta situación, Eilish emitió una orden de alejamiento, obligando a Rousseau a permanecer a más de 182 metros de ella y de sus padres.
La Reina del Pop, Madonna, también ha sido víctima de actos de obsesión. En 1995, Robert Hoskins acosó y amenazó a la cantante, llegando al punto de intentar irrumpir en su casa. Hoskins fue arrestado y condenado a diez años de prisión.
Selena Gómez tuvo su propio encuentro con la obsesión cuando un hombre la sorprendió con regalos obscenos en su mansión. El acosador fue detenido por el equipo de seguridad de Gómez y entregado a la policía.
Taylor Swift ha enfrentado múltiples episodios de acoso. Joseph Bernatche, quien afirmaba estar enamorado de la cantante, fue arrestado por esperar afuera de su casa en Rhode Island. Otro acosador, Julius Sandrock, fue detenido en Los Ángeles con un cuchillo, cuerdas y guantes en su auto.
Rihanna también sufrió acoso cuando Eduardo Leon intentó ingresar a su casa con la intención de tener relaciones sexuales con la artista. Leon fue declarado culpable y condenado a cinco años de libertad condicional.
Estos casos ponen de manifiesto la oscura realidad que algunas celebridades enfrentan debido a la obsesión de algunos fanáticos. Aunque la admiración es parte del mundo del entretenimiento, es esencial establecer límites y tomar medidas legales para proteger la seguridad y el bienestar de las figuras públicas.