El exlíder rebelde haitiano Guy Philippe, deportado desde Estados Unidos tras cumplir una condena por narcotráfico
Según Philippe, existe un grupo en Haití que controla tanto el poder político como la economía del país, y acusa a este grupo de vender la soberanía de la nación a extranjeros. Propone la necesidad de cambiar este sistema y aboga por la desobediencia civil y manifestaciones masivas para derrocar al Gobierno del primer ministro, Ariel Henry.
A diferencia de su participación en un golpe armado en 2004, esta vez Philippe llama a acciones no violentas, destacando la importancia de cambiar las cosas de manera esencial y necesaria. Señala que desde su regreso a Haití, ha estado realizando diversas acciones, como manifestaciones, declaraciones en los medios y visitas a sectores populares.
El artículo menciona que Philippe cuenta con la protección de agentes de la Brigada de Seguridad de las Zonas Protegidas (BSAP), desmovilizada por el Ministerio de Medio Ambiente pero que sigue actuando sin control aparente de las autoridades.
La población se ha manifestado en varias ciudades exigiendo la salida de Ariel Henry, a quien consideran incapaz de abordar los graves problemas que enfrenta el país. La fecha del 7 de febrero se destaca como importante en la historia política de Haití, ya que debería marcar la asunción del poder por parte de un presidente elegido cada cinco años, aunque no hay indicios de elecciones inmediatas.
Cabe señalar que Guy Philippe fue elegido senador en 2016 pero fue detenido en 2017 antes de poder jurar su cargo. Su historial incluye liderar una revuelta armada en 2003-2004, que resultó en la salida del presidente Aristide del poder. A pesar de sus acciones pasadas, Philippe enfrenta críticas y burlas en las redes sociales debido a su última condena por narcotráfico.