En un esfuerzo por buscar la intervención divina y la restauración de la paz entre la República Dominicana y Haití, varios líderes religiosos de diversas iglesias se reunieron cerca del puente fronterizo para realizar una concentración de oración. Los creyentes, unidos en sus súplicas, esperan una solución rápida al conflicto desencadenado por la construcción ilegal de un canal de riego en la localidad de Juana Méndez, que ha generado tensiones y afectado el intercambio comercial entre ambos países.
Arismendy González, uno de los religiosos presentes, expresó la creencia en el poder de la oración para superar las dificultades. "Vinimos a orar a este lugar, porque creemos que la oración es más poderosa que todo. Estamos orando para que Dios obre en este conflicto entre Haití y la República Dominicana, porque nosotros necesitamos a los haitianos y ellos a nosotros".
Maira Marmolejos, una devota que viajó desde la ciudad de Nueva York, afirmó su fe en el Dios del cielo como el único capaz de traer armonía y paz entre las dos naciones.
A pesar de la situación actual y la frontera cerrada por parte de Haití en protesta por las restricciones impuestas por el gobierno dominicano debido al canal en Juana Méndez, los religiosos y creyentes mantienen la esperanza en una solución pacífica.
Paralelamente, comerciantes y otros sectores de la sociedad civil en Dajabón planean sostener un encuentro en la explanada del mercado fronterizo para solicitar al gobierno que flexibilice algunas medidas en aras de la cooperación y la normalización de las relaciones entre ambos países.