Pese al cierre de la frontera entre la República Dominicana y Haití, las autoridades aduanales de Juana Méndez, Haití, permiten la entrada de alimentos y otras mercancías desde la República Dominicana. Los productos que entran deben pagar impuestos, cuya cantidad varía según la cantidad de mercaderías.
Para garantizar que se cumpla con el pago de los impuestos, un inspector de aduanas en Juana Méndez, Haití, se encuentra en el puente fronterizo para dirigir a los haitianos que tienen mercancías a la institución para realizar el pago correspondiente.
Sin embargo, algunos extranjeros intentan evitar pagar los impuestos y lanzan sus mercancías a grupos de haitianos que están debajo del paso internacional. Estos haitianos recogen las mercancías y cruzan el río Masacre a pie para llevar los productos a Haití. Las autoridades detienen a quienes infringen estas regulaciones.
El comerciante dominicano Juan Santiago Gómez ha señalado que debido al tráfico ilegal de mercancías hacia Haití, los productos de primera necesidad están siendo llevados de contrabando al país vecino. Ha hecho un llamado al gobierno para abordar esta situación.