El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, y el asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, han instado a Israel a proteger a los civiles en Gaza y a distinguir entre miembros de Hamás y civiles. Esto ocurre en medio de un aumento en las operaciones militares israelíes en Gaza en respuesta a un ataque de Hamás que ha dejado a cientos de personas muertas, en su mayoría civiles.
Biden subrayó que Israel tiene derecho a defenderse, pero debe hacerlo de acuerdo con el derecho internacional humanitario, que prioriza la protección de los civiles. También destacó la importancia de proporcionar ayuda humanitaria a Gaza.
En una conversación telefónica con el presidente egipcio, Abdel Fattah al-Sisi, Biden se comprometió a acelerar y aumentar significativamente la ayuda humanitaria que fluye hacia Gaza.
Líderes de todo el mundo, como el primer ministro británico, Rishi Sunak, y el presidente francés, Emmanuel Macron, han llamado a la necesidad de ayuda humanitaria urgente para Gaza, y el jefe de la ONU, António Guterres, advirtió que la situación se volvía cada vez más desesperada.
Naciones Unidas también alertó sobre el colapso del orden civil en Gaza a medida que las personas saqueaban depósitos de alimentos.
A pesar de que Estados Unidos es un aliado principal de Israel, la administración Biden ha insistido en que solo los líderes de Israel toman decisiones sobre las operaciones militares y ha multiplicado los llamados para proteger a los civiles palestinos.
Sullivan también señaló que Hamás estaba utilizando a civiles como escudos humanos, pero enfatizó que Israel debía tomar medidas para distinguir entre Hamás y los civiles inocentes palestinos.
Además, los funcionarios estadounidenses están trabajando para garantizar la liberación de rehenes y ayudar a cientos de palestinos estadounidenses atrapados en la zona.
La situación en Gaza sigue siendo crítica, y la comunidad internacional está buscando soluciones para poner fin a la violencia y proporcionar asistencia humanitaria a los afectados.